Ramos Allup también se refirió a la gravedad de la situación que atraviesa Venezuela, y advirtió que “nadie quiere un estallido social, porque todos saben cuándo comienzan, pero no cuándo ni cómo terminan”

La Mesa de la Unidad Democrática arrancó este miércoles, desde el estado Nueva Esparta, una campaña para activar la recolección del 20 por ciento de huellas del electorado y así convocar este año al referendo revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro.

En rueda de prensa realizada en Porlamar, el presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup, los diputados Tomás Guanipa y Tobías Bolívar, y el alcalde de esa ciudad, Alfredo Díaz, adelantaron detalles de la campaña que arrancará con un acto en la calle San Rafael de la capital neoespartana a partir de las tres de la tarde y que ha sido denominada Gran Concentración Héroes del Revocatorio.

Guanipa dijo que está seguro “de que este inicio de campaña nos va a llevar a una presión tal que no va a dejar otra alternativa que activar de inmediato” la siguiente etapa del referendo revocatorio, en la cual casi cuatro millones de venezolanos deberán acudir a los centros que disponga e CNE a estampar su huella, con lo cual estarán manifestando su voluntad de que se convoque el referendo.

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“Este proceso debe empezar de forma inmediata. No hay que esperar al 26 de julio como dijo la señora Tibisay Lucena. El cruce entre las huellas (de los electores que validaron sus firmas) y la data del CNE ya se hizo, por lo cual no hay que perder tiempo. Nuestra presión es para que el proceso se inicie de inmediato sin esperar el 26 de julio porque así lo está reclamando la gente”, dijo.

“Pero además, porque cada día que pasa la crisis se profundiza. Ayer los niños del hospital JM de los Ríos comieron a las 4 de la tarde. El hambre está llegando a todas partes. Cada día que pasa la presión social será mayor y nosotros lo que queremos es evitar una confrontación violenta en Venezuela. Los únicos que estamos jugando a la paz en el país somos los de la Unidad Democrática al convocar a un proceso electoral pacífico”, agregó.

“Para nosotros el 26 es una fecha inaceptable. Este proceso tiene que empezar ya. Arrancamos aquí en Margarita. El sábado habrá nuevas concentraciones en otras partes del país. Estaremos informando por la prensa de cada una de las actividades que se estarán haciendo a lo largo y ancho de toda Venezuela”, indicó.

Al responder a una pregunta de los reporteros, Guanipa aseguró que la MUD “no tiene una carta bajo la manga” para presionar al CNE para que convoque el referendo este año. “Nuestra única carta es el pueblo venezolano y esa carta está más clara que nada. Es el pueblo el que ha hecho suyo el rr. No le pertenece a la Unidad ni a ninguna organización partidista. La Unidad lo que ha hecho es darle organización proceso. Es la gente la que quiere que se cumpla”.

Un gobierno asustado es muy peligroso

Ramos Allup también se refirió a la gravedad de la situación que atraviesa Venezuela, y advirtió que “nadie quiere un estallido social, porque todos saben cuándo comienzan, pero no cuándo ni cómo terminan”.

“Estamos conscientes de los problemas que tenemos por delante. Este es un gobierno profundamente asustado y, en consecuencia, profundamente peligroso. Quien se siente en peligro existencial cree que su supervivencia justifica cualquier cosa. Debe ser terrible para un dirigente democrático sentirse despreciado, rechazado, abominado en forma permanente por el pueblo. Cuánto más abajo puede caer el gobierno, no se sabe. Un presidente que, según todas las encuestas, solo tiene 12-13 por ciento de aceptación, está colocando en situación de peligro al país y nadie tiene ese derecho de ponernos en ese peligro solo por su miedo”, dijo.

Advirtió también que la represión en el país ya no es solamente política, lo cual, de por sí, es un hecho lamentable. En ese sentido condenó la detención, la tarde de ayer martes, de cinco jóvenes de Voluntad Popular en el estado Bolívar. “Los detuvieron porque repartían volantes sobre la audiencia de apelación de Leopoldo López”, indicó.

“Pero si ya es inaceptable que a un manifestante pacífico lo repriman, le raspen la cabeza, le pongan un uniforme de presidiario y lo manden a una cárcel común, a exponerse a cualquier tipo de atrocidad de las que pueden ocurrir en una cárcel común, más todavía es difícil entender que repriman a alguien que está haciendo una cola porque necesita comprar alimentos y eso está ocurriendo en todo el país. Le caen a palo a la gente porque estos imbéciles creen que desapareciendo a la gente, va a desaparecer los problemas”, denunció.