“El régimen ha usado la palabra ‘diálogo’ para tergiversar. Pero yo lo he dicho, para falsos diálogos no nos vamos a prestar. El canciller de Italia decía que veía a Maduro alejado de la realidad“, sumó.

El presidente de la Asamblea Nacional (AN), Juan Guaidó, señaló este jueves que “lo de Noruega no es un diálogo, insisto, si no hay cese de la usurpación no hay nada“,

Asimismo, indicó en una entrevista con el periodista Sergio Novelli, transmitida en VPI, que “todas las opciones están presentes para lograr el cese de la usurpación: Calle, sanciones, negociaciones, el artículo 187, numeral 11. Lo importante es que sí estamos cerca del objetivo”.

Sostuvo que “estamos en ese momento donde debemos mantener las movilizaciones, continuaremos con la gira en función de la Operación Libertad“.

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“El régimen ha usado la palabra ‘diálogo’ para tergiversar. Pero yo lo he dicho, para falsos diálogos no nos vamos a prestar. El canciller de Italia decía que veía a Maduro alejado de la realidad“, sumó.

Acotó que “en el marco de la estrategia que hemos planteado estamos nosotros conversando con el Grupo de Contacto. Nos preocupa la crisis humanitaria. El régimen no sólo esta desnudo sino que está loco“.

Aseguró que el Gobierno de Nicolás Maduro será derrocado “por la fuerza de los ciudadanos o por la fuerza de la cooperación internacional”.

“Que decidan ellos cómo quieren salir, si por la fuerza de los ciudadanos o por la fuerza de la cooperación internacional”, aseveró.

La crisis política en Venezuela empeoró el 10 de enero, cuando Maduro decidió iniciar un segundo mandato de seis años que no reconocen ni la oposición ni buena parte de la comunidad internacional porque consideran que las elecciones presidenciales del 20 de mayo de 2018 fueron un fraude.

En respuesta, Guaidó se juramentó mandatario interino el 23 de enero con el objetivo de cesar la “usurpación”, crear un gobierno de transición y celebrar “elecciones libres”. Estados Unidos, la mayoría de los países latinoamericanos, incluido Colombia, y numerosos europeos, entre ellos España, le han reconocido.

La situación se ha agravado a raíz del 30 de abril, cuando Guaidó y un liberado Leopoldo López capitanearon un alzamiento militar que, de acuerdo con la versión de Estados Unidos, se vio frustrado a causa de la intervención de Rusia y Cuba.

Tras este nuevo pico de tensión, emisarios del Gobierno y de la oposición viajaron a Oslo para explorar la posibilidad de retomar el diálogo, algo que Maduro ya propuso tras las elecciones presidenciales y a lo que Guaidó se ha negado debido a las malas experiencias del pasado. // Sumarium.com