La República Bolivariana de Venezuela participó en el Grupo de Trabajo de Composición Abierta y Tercera Reunión Extraordinaria de las Partes del Protocolo de Montreal, realizadas en Viena, Austria, con el objetivo de establecer las políticas internacionales para el control y eliminación de los Hidrofluorocarbonos (HFC), según información suministrada por la delegación venezolana.
Los HFC son sustancias utilizadas en los sistemas de refrigeración y aires acondicionados domésticos e industriales. Estos, a pesar de no afectar la capa de ozono, tienen alto potencial de calentamiento global, por lo cual en el escenario internacional se discute acerca de su incorporación al mencionado Protocolo, mediante la aprobación de una enmienda.
Durante las deliberaciones se discutieron aspectos acerca de los desafíos y soluciones para la gestión de los HFC, entre los que se encuentran: la eficiencia energética, necesidades de financiación, seguridad de los productos alternativos, disponibilidad de tecnologías, funcionamiento y problemas relacionados con las altas temperaturas del ambiente, construcción de capacidades y sinergias con la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.
En este sentido, el Ministerio del Poder Popular para Ecosocialismo y Aguas (Minea), ejecuta una serie de programas referentes al tema tales como el seguimiento, vigilancia y control relacionados con estos gases, inventario oficial de refrigerantes agotadores de la capa de ozono y de HFC (lo cual tributa al inventario de gases de efecto invernadero) y capacitación del personal de las aduanas del país, entre otros.
La representación venezolana estuvo integrada por la presidenta de Hidrocapital, Evelyn Vásquez e Igzóbel Castro,; la directora de Gestión de Emisiones y Efluentes de la Dirección General de Gestión de la Calidad Ambiental del Minea (como punto focal técnico), el embajador de Venezuela en Austria, Jesse Chacón; personal de los ministerios del Poder Popular para las Relaciones Exteriores y para Industrias y Comercio.
Como se recordará, el Protocolo de Montreal entró en vigor el 1° de enero de 1989 y logró la ratificación universal en el año 2009, cuyo propósito es proteger la capa de ozono, con la adopción de medidas preventivas para controlar las emisiones mundiales de Clorofluorocarbonos (CFC) y Hidroclorofluorocarbonos (HCFC), entre otros.
Prensa Ecosocialismo y Aguas (Minea) / Rayland Guirola