(El Universal).- El nuevo sistema controlado de subasta para la venta de divisas en Venezuela que fue presentado este martes es visto por economistas con cautela y bajas expectativas, pues aseguran que el mecanismo incentiva la corrupción en el país y no resuelve las «distorsiones» económicas.
«Es más de lo mismo, porque los sistemas cambiarios de Nicolás Maduro (Presidente de la República) no han resuelto nada. Lo único que han resuelto es aumentar la corrupción y disminuir la disponibilidad de divisas de las empresas», dijo a Efe el economista Luis Oliveros.
El Gobierno de Venezuela explicó este martes que este nuevo programa de subastas entre bandas controladas por el Banco Central (BCV) que se iniciará el jueves, adjudicará divisas dos veces por semana.
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A través del nuevo sistema de Divisas Complementarias (Dicom) las personas naturales podrán optar por hasta 500 dólares trimestrales, con un límite de 2.000 dólares anuales, mientras que las empresas podrán comprar el equivalente al 30 % de su ingreso bruto mensual, con base en su declaración de impuestos sobre la renta.
Según el Gobierno, el monto de las subastas fluctuará entre bandas «controladas», con límites mínimos y máximos regulados por las autoridades financieras.
El experto señaló la importancia de que la tasa en efecto fluctúe, porque, a su juicio, «si van a hacer que la tasa se mantenga más o menos controlada, como hicieron con el sistema anterior, eso te garantiza el fracaso».
Oliveros dijo estar convencido de que «no va a haber transparencia en la adjudicación» de estas divisas, aunque «el Gobierno está prometiendo que va a publicar quiénes son los que salen beneficiados de este sistema, algo que, asegura, no se hizo bajo el esquema anterior.
Aunque las autoridades no detallaron cómo será la construcción de las bandas, Oliveros dijo que «hay rumores» de que la tasa podría oscilar entre 1.500 y 2.000 bolívares por dólar.
«Dudo que el Gobierno vaya a tomarse la foto con una tasa de cambio de 4.000, 5.000 bolívares (…) El dólar es el bien más escaso en Venezuela, el Gobierno debería venderlo caro, no estarlo regalando a 725 bolívares (actual tasa del Dicom)», acotó.
Otra de las críticas al nuevo Dicom es la «limitante» de que las operaciones de compra y venta podrán llevarse a cabo solo a través de la banca pública.
El economista Asdrúbal Oliveros, director de la Consultora Ecoanalítica, consideró que esta limitación es el «primer gran fallo del esquema», ya que los dólares adjudicados serán depositados en entidades financieras públicas, y, según él, estas tienen «serios problemas de corresponsales».
Es decir, problemas con entidades financieras aliadas en el exterior.
«Esto significa: ¿cómo vas a sacar los dólares a tus cuentas en el exterior…? Allí se los dejo», indicó el también economista a través de Twitter.
Sobre la reacción del mercado, ambos especialistas destacaron que el sistema cambiario no oficial, conocido en el país como «dólar paralelo», reaccionó al alza ante la noticia del nuevo esquema cambiario.
«Es primera vez que pasa esto cuando anuncian un sistema cambiario en Venezuela, siempre ha reaccionado a la baja (…) El mercado como que se cansó de los anuncios cambiarios del Gobierno y este empezó a subir, subió levemente, pero rompe esa tendencia», dijo Luis Oliveros.
Por su parte, el director de Ecoanalítica estimó que, aunque en los primeros días de arranque del nuevo Dicom la tasa «no oficial puede ceder un poco, la tendencia estructural al alza se mantiene».